Recientemente salió de la línea de producción el ejemplar un millón del Porsche 911, modelo que, para muchos, es el más importante en la historia de la casa de Stuttgart y es que este icónico deportivo ha sido punta de lanza para que la marca alemana mostrara a lo largo de medio siglo sus innovaciones tecnológicas y a continuación te diremos cuáles han sido las más importantes en su historia.
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Durante siete generaciones, el Porsche 911 ha sido dotado de desarrollos tecnológicos siempre en pro del desempeño de este deportivo nacido en 1963 y fue justamente en ese año cuando la firma germana comenzó a mostrar tecnologías para que ese momento eran impensables.
LAS INNOVACIONES TECNOLÓGICAS DEL PORSCHE 911
1963 Sistema de seguridad
El Porsche 911 debutó ese año y montaba en aquel entonces el primer sistema de dirección de cremallera y piñón y formaba parte de sus atributos de seguridad.
Generaciones posteriores también fueron equipadas con un tubo de malla de acero como el elemento de deformación.
En caso de un impacto frontal el volante no se desplazaba directamente hacia el conductor, sino que, gracias al ángulo de la columna de la dirección, se alejaba de la banca a través de los tubos de impacto y los elementos de liberación.
1966 Discos de frenos ventilados internamente
Porsche presentó los frenos ventilados internamente para el 911 S en 1966. Estos discos eran de doble pared, de manera que el aire circulara y la fricción de calor fuera reducida.
Las ventajas de todo este esfuerzo no sólo son los sistemas de frenos que son extremadamente estables y por lo tanto juegan un papel importante en la conducción de alta precisión, sino también que los vehículos de producción en serie de Porsche siempre tienen las distancias de frenado más cortas de su clase, un beneficio de seguridad significativo en las vías públicas.
Buscando optimizar aún más el enfriamiento, los sistemas de frenos de disco en los modelos 911 posteriores también tienen conductos de aire de impulsión que guían el aire fresco a través de los canales sobre los discos de freno desde el frente. Sí, suena muy técnico, pero lo resaltamos porque Porsche llevó su experiencia en competiciones a los autos de calle y este adelanto es uno de ellos.
1972 Alerones delantero y trasero
Para la década de los 70, Porsche mejoró la aerodinámica de su 911, siendo en 1971 el año en que montó por primera vez el alerón delantero, el cual también fue el resultado del conocimiento adquirido en las competencias a motor. Originalmente fue montado en el 911 S y posteriormente en el 911 E.
El papel del alerón trasero es descargar el aire que fluye alrededor del vehículo en el lugar correcto (el labio del alerón), con la menor turbulencia posible.
El Porsche 911 Carrera RS 2.7 presentó el alerón trasero denominado “Cola de Pato”, un distintivo le ayudó a convertirse en un vehículo de culto. El siguiente spoiler trasero que realmente podría ser llamado ‘histórico’ fue el que presentó el 911 Turbo. Su diseño grande y plano adornaba el vehículo y, además de su función aerodinámica, era también una declaración de la potencia y velocidad del Turbo.
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1973 El turbocargador
En ese año, los técnicos buscaron la forma de que la estructura del Porsche 911 permitiera la entrada de la mayor cantidad de aire posible en los cilindros de modo que cuando éste fuera comprimido y mezclado con el combustible, pudiera crear una alta presión de funcionamiento.
Este es el primer Porsche 911 que montó un turbocargador.
El 911 Turbo, presentado en 1973, integraba un motor turbo de 3 litros que contaba con un control de presión de carga en el lado del escape, algo que había sido previamente probado a fondo en las carreras de autos. Con el 911 Turbo, que comenzó a ser producido en serie en 1974, Porsche fue el primer fabricante de automóviles en utilizar con éxito el turbocargador durante los diversos estados de conducción.
1988 Tracción total
El 959 era un modelo tecnológicamente avanzado en todos los aspectos. Producido como una edición limitada (337 autos, incluidos 37 prototipos y modelos de preproducción), su influencia puede ser vista en su sucesor, el primer modelo de producción en serie de Porsche con tracción total, el 911 Carrera 4, presentado en 1988.
Para una mejor dinámica de conducción, el 959 estaba equipado con un bloque central electrónico del diferencial infinitamente variable y distribuía el par a los ejes dependiendo de la distribución de carga de cada rueda y los coeficientes de fricción de las ruedas en la carretera.
El Carrera 4, presentado en 1994, representó la siguiente etapa evolutiva de la tracción integral Porsche. Por ejemplo, el eje del auto fue equipado con un embrague multidisco viscoso adaptado de manera óptima.
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2008 Transmisión de doble embrague PDK
La famosa transmisión de doble embrague de Porsche, conocida como PDK fue presentada en un automóvil deportivo de fabricación en serie por primera vez cuando fue instalada en 2008 en el 911 serie 997.
Era de siete marchas hacia delante y una hacia atrás y estaba inicialmente disponible como equipamiento opcional en los modelos Carrera y Carrera S.
Esta es la estructura de la transmisión PDK.
Su principal ventaja fueron los cambios que eran más rápidos en comparación con las transmisiones manuales y automáticas. Los cambios de marcha ya estaban enganchados cuando el conductor hacia el cambio de marcha y el impulso no se perdía durante el proceso. A la fecha esta caja es uno de los placeres más grandes para quien tiene un Porsche.
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