Lavar tu vehículo frecuentemente no solo hará que luzca bien, también te ayudará a preservar su pintura y protegerlo contra la corrosión, manchas y hasta algunos rayones. Y si eres de los que no les gusta llevar su vehículo a un autolavado, aquí te compartimos 10 consejos que debes conocer.
1. Elige el lugar y hora adecuada
Lava tu coche en un lugar con sombra y en un día fresco, de preferencia. Ya que lavar tu vehículo bajo el sol directo puede hacer que el jabón y el agua se sequen demasiado rápido, dejando manchas y rayas en la pintura, sumado a que el lavado será más tardado. Por cierto, hace algunas semanas te compartimos una guía completa de como mantener tu vehículo en las mejores condiciones, seguro te va a interesar.
2. Reúne todo el equipo necesario
Antes de comenzar, asegúrate de tener a la mano todo lo que necesitas: cubetas, manguera, esponjas o guantes de microfibra, jabón específico para vehículos, toallas de microfibra, etc. Es importante que utilices solo productos especializados, porque estos fueron creados para utilizarse en las pinturas automotrices, de no ser así, podrías afectar el brillo y apariencia de la pintura.
3. Prepara el vehículo
Antes de aplicar cualquier jabón, enjuaga tu coche con agua limpia para eliminar la suciedad suelta y los residuos. Esto ayudará a evitar que las partículas de polvo y otros contaminantes rayen la pintura. ¿Sabes por qué es importante el mantenimiento de tu vehículo? Aquí te lo decimos.
4. Usa el jabón correcto
Nunca uses detergentes domésticos o jabón de trastes para lavar tu vehículo, ya que pueden dañar la pintura. Utiliza un jabón específico, que está formulado para ser suave con la pintura y efectivo contra la suciedad.
5. Método de los dos cubetas
Utiliza dos cubetas para lavar tú vehículo: uno con agua jabonosa y otro con agua limpia para enjuagar la esponja o guante de microfibra. Este método ayuda a reducir el riesgo de rayar la pintura con la suciedad atrapada en la esponja. Además de ahorrar agua durante el proceso
6. Lava de arriba hacia abajo
Comienza lavando el vehículo desde el techo y ve bajando hacia las partes inferiores, tanto de las puertas como fascias. Las secciones inferiores del coche suelen ser las más sucias, así que es mejor dejar esas áreas para el final para evitar esparcir la suciedad por todo el vehículo, y de preferencia, cambia de microfibra. No talles, solo limpia la pintura.
7. Seca el vehículo correctamente
Después de enjuagar todo el jabón, seca la pintura con una toalla de microfibra limpia. Evita dejar que el vehículo se seque al aire, ya que esto puede causar manchas de agua, y con el paso del tiempo, son difíciles de quitar. La microfibra es ideal porque es suave y absorbe muy bien la humedad.
8. Limpia los rines y neumáticos
Los rines y neumáticos suelen acumular mucho polvo de frenos y suciedad. Usa un limpiador específico y un cepillo adecuado para eliminar toda la suciedad. Hazlo antes de lavar el resto del vehículo para que el polvo de frenos no salpique una superficie ya limpia. Y si quieres alargar la vida útil de tus neumáticos, en esta mini guía, vas a encontrar los mejores consejos para hacerlo.
9. No olvides los detalles
Presta atención a los detalles cómo los espejos, las ventanas y las manijas de las puertas. Usa un limpiador de vidrios para las ventanas y un paño limpio para asegurarte de que no queden manchas ni rayas.
10. Aplica una capa de cera
Una vez que el vehículo esté completamente seco, aplica una capa de cera para proteger la pintura y darle un brillo extra. La cera crea una barrera protectora contra el polvo, la lluvia y otros elementos ambientales, prolongando el buen estado de la pintura.
Y para finalizar, lava tu vehículo frecuentemente para mantenerlo en óptimas condiciones. La frecuencia ideal puede variar según tu ubicación y uso del coche, pero un buen hábito es lavarlo al menos una vez cada 15 días.