El segmento de los hatchbacks subcompactos deportivos tuvo un boom hace pocos años para intentar regresar a sus días de gloria. Modelos como el Peugeot 208 GT y el Renault Clio RS han puesto la vara muy alta, pero el Ford Fiesta ST es uno de esos raros ejemplares que logra cumplir con todo lo que se puede esperar de un auto de esta categoría.
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DISEÑO EXTERIOR
Para empezar, el exterior del auto logra diferenciarlo notablemente de su contraparte normal manteniendo el mismo diseño. Sabemos que es un Fiesta, pero se ve completamente diferente.
Los rines de 17 pulgadas, alerones, spoilers, escape deportivo y la enorme parrilla de panal nos dejan ver en todo momento que este Fiesta es un salto cuántico en cuanto a desempeño de la versión base.
Pero la cosa no se detiene ahí, en el instante en el que abrimos la puerta sabemos que nos espera una experiencia completamente diferente.
UNA MIRADA AL INTERIOR
Los asientos Recaro de dos tonos, la palanca de cambios de aluminio y el volante deportivo nos auguran un viaje sumamente divertido si es lo que estamos buscando.
La posición de manejo es baja pero la visibilidad es muy buena. Los asientos tienen gran soporte, no son muy anchos y los conductores de dimensiones grandes como yo sufriremos un poco para entrar en ellos, pero al final logran hacer su trabajo de manera excelente.
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En general los asientos no son lo más cómodo del mundo cuando estás atorado en el tránsito citadino, pero se te olvida por completo cuando tomas una curva y no tienes que preocuparte por deslizarte de un lado a otro mientras intentas mantener el auto dentro del trazo de la misma, o cuando tienes que hacer un cambio de carril repentino y no te tienes que reacomodar después.
El espacio interior es bueno para un auto de su segmento, las plazas traseras podrán llevar a dos adultos aunque no recomendamos viajes demasiado largos y la cajuela cumple muy bien con las necesidades diarias de una familia pequeña.
EQUIPAMIENTO
El equipamiento es bueno en general aunque hay un par de cosas que se agradecerían como la cámara de reversa, pero cuenta con acceso y encendido sin llave, vidrios eléctricos, sistema de audio con ocho bocinas y el sistema de interconectividad Sync de Ford.
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El volante es de buen diámetro y tiene una ergonomía excelente. Desde el momento el que te sientas en el auto sabes que está hecho para hacer una cosa, ir rápido.
MOTOR
El Fiesta ST utiliza el motor 4 cilindros EcoBoost turbo de 1.6 litros con 197 caballos de fuerza que lleva la potencia a las ruedas delanteras a través de una caja manual de 6 cambios.
El recorrido de la palanca es corto y preciso, y a pesar del contenido tamaño del motor, la entrega de potencia es bastante pareja durante la mayor parte de las revoluciones. El turbo tiene un poco de retraso en la parte baja del tacómetro, pero nada escandaloso.
El Fiesta ST pretende regresar a los orígenes del segmento de los “hot hatch”, un auto que puedes usar todos los días de manera civilizada, pero cuando quieres divertirte lo único que hay que hacer es apretar el acelerador para que el auto cambie por completo.
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El Fiesta ST no tiene botones extras para hacerlo ir más rápido, tú eres el botón Sport, tú decides en cualquier momento cómo quieres que se comporte el auto sin tener que revisar el manual y buscar un botón que modifique su comportamiento.
DESEMPEÑO
Si quieres manejar de manera civilizada y ahorrar gasolina es el mismo caso, tu pie derecho es también el modo “Eco”. El único botón que tiene es el del control de tracción y una vez que se aprieta, se desactiva por completo dejándonos el control total del auto.
Aquí no hay etapas, ni modos de manejo, ni personalización electrónica de cómo queremos que se comporte, todo lo hacemos nosotros con nuestros pies y manos.
Hablando de comportamiento dinámico, el Fiesta ST logra cosas que no esperaríamos de un auto de sus características. A pesar de ser tracción delantera el auto es muy neutral y los ingenieros de Ford lograron un balance excelente entre ambos ejes para mantener al auto metido en las curvas y salir a toda velocidad reduciendo el subviraje de manera sorprendente.
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PRECIO
El Fiesta ST no es el más potente de su segmento, ni tampoco el más rápido, pero no se trata de lo que hace sino de cómo te hace sentir mientras lo hace.
Todo lo anterior está disponible por 330 mil pesos, una ganga si consideramos que el Fiesta ST nos da algo que muchos otros autos de mayor precio no logran por más que lo intenten: ponernos una sonrisa en la cara cada vez que lo manejamos.
CUÉNTANOS…
¿Cuál crees que sea el mejor atributo de este Fiesta ST?
¿Cuál es tu modelo de Ford favorito?
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